jueves, 1 de julio de 2010

El periodismo en el cine


El pasado 3 de Mayo se celebró el Día Mundial de la Libertad de Prensa, como cada año, desde que en 1993 fuera proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Este día nació con el motivo de fomentar la libertad de prensa y de expresión en todo el mundo; defender a los medios de comunicación; así como, rendir homenaje a los periodistas que han fallecido o han sido atacados mientras desempeñaban su trabajo.
De este modo, se insta a los diferentes organismos que trabajan con la información, a que ésta sea de acuerdo a la libertad, pluralidad y veracidad, de que toda sociedad democrática debe constar, en teoría.
Por otro lado, este día sirve como conmemoración hacia aquellas personas, periodistas, que han perdido la vida por el hecho de dedicarse al periodismo, o han sido privadas de poder realizar su profesión. Según el barómetro que cada año realiza Reporteros Sin Fronteras (RSF), en lo que llevamos de 2010: 9 periodistas han muerto y 168 han sido encarcelados, así como 9 colaboradores y 120 ciberdisidentes, que también están o han estado en la cárcel.
Con este motivo, me quiero referir al papel que el periodismo ha desempeñado en la historia del cine. Éste, al igual que la prensa, ha padecido censuras, prohibiciones y convencionalismos. Muchas veces se ha impedido mostrar la realidad o ésta se ha ajustado según conveniencias. Y ésto ocurre sobre todo con el cine documental, político, biográfico..., donde en mayor medida existen resquicios de veracidad.
Son muchos los clásicos del séptimo arte cuyo argumento está estrechamente ligado al periodismo. Ciudadano Kane (1940), El Gran Carnaval (1951) o Vacaciones en Roma (1953) son algunos ejemplos, en los cuales se narran las vicisitudes de protagonistas que se dedican al mundo de la información.
En la historia del cine español, también se encuentran desde finales de los años 40, títulos relacionados con esta profesión: Los chicos de la prensa (1937); Historias de la radio (1955); Escuela de periodismo (1956); Solos en la madrugada (1978); La verdad sobre el caso Savolta (1979); Demasiado para Gálvez (1980); Antonieta (1982); Los reporteros (1984); Cómo ser mujer y no morir en el intento (1991); Tesis (1996); Territorio Comanche (1997), etc.

Por Aída Cerón.

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